Desconectar para conectar

Nosotros y nuestros móviles, nosotros y las redes sociales,pero sin darnos cuenta de que verdaderamente solo somos nosotros. Creemos que al estar casi medio día con el teléfono en la mano conocemos todo lo necesario y sin ver que lo único que hacemos es perdernos muchos momentos de la vida.
cuando quedamos con los amigos, con nuestras parejas o simplemente estando en casa, somos como personas autistas, sin relación ni conversación alguna.
Recuerdo cuando mis padres ponían el telediario, y para distraerme lo único que podía hacer es darle conversación intentar entender el vocabulario de la periodista. ahora el tema de conversación es lo justo para ser educado, sin pasar de un simple que tal.
Pero cuando apartamos la vista de ese aparato electrónico nos damos cuenta de lo importante que es lo que nos rodea, ya que estamos rodeados de momentos necesarios para nuestra vida.

La esperanza lo último que se pierde

 
Este artículo esta basado en un artículo publicado en el periódico El País  escrito por José Campos Trujillo el 9 de septiembre de 2012. 
En el artículo José Campos describe muchas de las situaciones en las que se encuentran los alumnos universitarios por todos los recortes en la educación que esta llevando a cabo el gobierno.
                                   

Artículo

      Mientras muchas personas no tienen ni para comer, ayudándose por los productos de cáritas, el gobierno con la subida del IVA pretende que la sociedad pague un elevado precio por libros y materiales escolares que después la mayoría ni utilizaran, perdiendo asi demasiado dinero. De esos alumnos que podrán ir al colegio se enfrentan a compartir la clase con una media de 27 alumnos, además de escasos profesorado por lo que carecerán  de recursos suficientes para el aprendizaje.

Si avanzamos unos años  aquellos privilegiados que

 terminen sus estudios y pretendan acceder

 a la universidad,les esperan no una muy buena bienvenida, ya que deberá superar una prueba impuesta por cada universidad y si  llegaran a aprobarla , pagarán una matricula de gran 

coste para poder seguir con sus estudios, no siendo estas las únicas dificultades con las que  tendrán que  luchar, ya que podrán escuchar sus clases desde el pasillo, por la falta de sitio. 

 En definitiva la mayoría de los alumnos serán los que  sus 

 padres tengan un cierto poder adquisitivo.

 Aunque con un elevado paro juvenil en España, esos estudios nos les servirá de nada en nuestro país , ya que esta generación se perderá no encontrando ese puesto de trabajo aquí , buscándolo en otros países , puesto que si se quedan  solo incrementaran la tasa de paro y con lo único que vivirá sera con la esperanza de poder ejercer de lo que le gusta .